9/12/09

Julio Cortázar

-

      Quise elegir una fotografía  o una caricatura de Cortázar para ilustrar este texto de Manuel Vicent, pero no me decidí por ninguna. Al ser todas tan buenas, me pasó como a los niños cuando les das a elegir uno entre una bolsa de caramelos. No saben, no supe, con cual quedarme. Da igual. Todos lo tenemos identificaedo en la memoria con su pipa, su barba y su jersey  de cuello alto, como un capitán de barco varado en el Sena o en el Río de la  Plata. Aunque realmente París fué su ciudad y fué su tumba y sobre todo, fué su casa. Cortázar escribió para los niños que en el fondo éramos, y nos regaló la libertad que no teníamos. Y una nueva forma de jugar a la mariquitilla. A la Rayuela.

     Lo que sigue, es el inicio de una semblanza  de J. Cortázar que Manuel Vicent incluye en su libro Póquer de Ases y que acaban de regalarme. Me gustó tanto que quise compartirlo con vosotros. Pero os aconsejo el libro, que es una gozada. ¡Disfrutadlo tanto como yo!


       "Tenía las piernas demasiado largas para ser ciclista, pero se paseaba por París montado en una bicicleta que había bautizado con el nombre de Aleluya, por aquel París que de buena mañana, con las calles recién regadas, olía a cruasán y a pan caliente. Vivía como un estudiante y no era un estudiante; daba la sensación de estar exiliado y no era un exiliado; queda por saber si Julio Cortázar era realmente argentino y no un desarraigado, que había convertido la literatura fantástica, el jazz, la pintura de vanguardia, el boxeo y el cine negro en su única patria y París en una metáfora, en una cartografía íntima. Si ser argentino consiste en estar triste y en estar lejos, Julio Cortázar hizo de su parte todo lo posible para responder a ese modelo, que cada lector podía armar y desarmar a su manera."


      Todos los chicos de mi generación quisieron ser Cortázar. Todas las chicas quisimos ser La Maga. Y París la meta de  nuestros sueños vagabundos. Todo quedó en una tarjeta postal de Le Pont des Arts enviada desde París durante nuestras "lunas de miel".

                Chity Taboada Pardo.

2 comentarios:

ALBERTO TABOADA dijo...

Estaba convencido de que te gustaría... y además, ¿sabes una cosa? Fue precísamente ésta la semblanza que leí a toda prisa en LA CASA DEL LIBRO y me gustó tanto que fue lo que me decidió por este libro entre tantos tan apetecibles que tenía a la vista. Me alegra mucho que te haya gustado.

Chity Taboada dijo...

Gracias por el comentario, me ha hecho mucha ilusión. Y gracias por el libro. Ya voy por Lord Jim y su Corazón de las tinieblas. Me gustaron también Lampedusa y Camus. De momento gana Cortázar, pero todas son buenas.

Chity.